La Vía Campesina en el Grupo de Trabajo del Comité de Seguridad Alimentaria respecto a los mercados vinculados a los sistemas alimentarios locales y nacionales
Del 8 al 9 de junio se realizó en Roma la reunión  Grupo de Trabajo de composición abierta del Comité de Seguridad Alimentaria respecto a los mercados vinculados a los sistemas alimentarios locales, nacionales y regionales. A continuación podrán ver la intervención de Ramona Duminicioiu y Angel Strappazon delegados de La Vía Campesina.
  

Ramona Duminicioiu - Ecorurales Rumania – ECVC – Vía Campesina
A nivel mundial, más del 80 % de los productores a pequeña escala operan en mercados locales y nacionales de alimentos, y la mayoría de ellos realizan sus intercambios de manera informal. A través de estos mercados extremadamente diversos transita la mayoría de los alimentos que se consumen en el mundo. Funcionan en espacios territoriales que pueden ir desde el plano local al transfronterizo o regional, y pueden situarse en contextos rurales, periurbanos y urbanos.



Se vinculan directamente con los sistemas alimentarios locales, nacionales o regionales: los alimentos se producen, se procesan, se comercian y se consumen dentro de un espacio determinado y el valor añadido que aportan se mantiene y redistribuye en ese espacio, ayudando además a crear empleo. Pueden presentar una configuración estructurada o funcionar de manera más informal o específica, lo que ofrece una mayor flexibilidad a los productores a pequeña escala y les impone menos barreras de entrada y les concede un mayor control sobre los precios y sobre las condiciones del mercado. Desempeñan múltiples funciones que van más allá del intercambio de bienes, actuando como un espacio para la interacción social y el intercambio de conocimientos. Son extremadamente inclusivos y se muestran accesibles a productores a pequeña escala y otros grupos en situación de inseguridad alimentaria, en especial las mujeres, contribuyendo por tanto a materializar su derecho humano a la alimentación.
Pese a su importancia, se suele pasar por alto a los mercados informales en los sistemas de recopilación de datos, con la consiguiente repercusión negativa sobre la base empírica para fundamentar políticas públicas. Puesto que la mayoría de las mujeres que actúan como productoras a pequeña escala suelen participar en mercados informales, su contribución esencial a los sistemas alimentarios (incluida la distribución de alimentos) y al crecimiento económico permanece prácticamente invisible por lo que respecta al comercio y a los procesos de elaboración de políticas de desarrollo, lo que hace que se enfrenten a barreras socioeconómicas particulares a la hora de acceder a los recursos y a las oportunidades de mercado, con el consiguiente aumento de la marginalización y la consiguiente conculcación de sus derechos.
En vista de su importancia para la seguridad alimentaria y para los medios de vida de los productores a pequeña escala, las políticas e inversiones públicas deberían orientarse hacia el fortalecimiento, la expansión y la protección de los mercados territoriales.
Para ello, solicitamos la adopción de recomendaciones para la recopilación datos exhaustivos sobre los mercados locales, nacionales e informales —tanto rurales como urbanos— vinculados a los territorios, con el fin de mejorar la base empírica para fundamentar políticas, lo que incluye recabar datos desglosados por sexo,  e incorporar esta práctica como un elemento habitual de los sistemas nacionales e internacionales de recopilación de datos. También, queremos destacar entre las recomendaciones políticas la transparencia en la fijación de precios de los productos agrícolas  que ofrezcan una buena remuneración para la labor de los productores a pequeña escala y sus propias inversiones, incluidas las mujeres rurales.  Las políticas de fijación de precios deberían conceder acceso a los productores a pequeña escala a información oportuna y asequible sobre el mercado para que tomen decisiones fundamentadas sobre qué, cuándo y dónde vender, protegiéndose frente al abuso de poder de los compradores, en especial en mercados concentrados.
Angel Strappazon , Movimiento Nacional Campesino Indígena de Argentina, Cloc- Vía Campesina.
Gracias por los esfuerzos que hacemos entre todos para el bien de los pequeños productores y también para el bien de los consumidores y de nuestros pueblos. En lo que respecta a las compras públicas, nuestras recomendaciones se basan en detaectar oportunidades para que los productores a pequeña escala puedan contar con una demanda constante y estable de productos agrícolas y para que los consumidores puedan acceder a alimentos saludables, nutritivos, diversificados, frescos y producidos a nivel local, también durante crisis y conflictos. En segundo lugar, solicitamos la promoción de programas de adquisiciones institucionales en escuelas, hospitales, cárceles, residencias para ancianos y  comedores de funcionarios públicos, proporcionando alimentos producidos por los productores a pequeña escala a través de mecanismos participativos que los incluyan en el proceso.
Finalmente, proponemos mejorar los procedimientos de adquisición en colaboración con los productores a pequeña escala y sus organizaciones,  con modalidades adaptadas que pueden incluir un lenguaje simplificado, la omisión de las fianzas de cumplimiento, adelantos rápidos y frecuentes y cantidades y plazos viables.