Misiones: “La tierra es de quien la trabaja”
Desde el norte de Misiones, campesinas y campesinos organizados en la COTRUM-MNCI denunciamos a los especuladores que una vez más intentan desalojarnos, verdaderos buitres de la tierra, y reclamamos a la justicia que se respete nuestro derecho a vivir con dignidad en nuestros territorios.
Somos 13 familias que vivimos en el paraje Cabure-í, municipio de Comandante Andresito y estamos siendo amenazadas de desalojo. Nosotros, durante muchos años hemos trabajado con gran esfuerzo para que nuestras tierras produzcan, hemos construido nuestras viviendas y hemos hecho innumerables mejoras para que estas tierras dejen de ser sólo lotes abandonados de la explotación forestal y se conviertan en un territorio que brinde trabajo y alimentos, respetando el monte, el agua y la vida. Hoy casi 100 campesinas y campesinos trabajamos allí para vivir dignamente.
Somos 13 familias que vivimos en el paraje Cabure-í, municipio de Comandante Andresito y estamos siendo amenazadas de desalojo. Nosotros, durante muchos años hemos trabajado con gran esfuerzo para que nuestras tierras produzcan, hemos construido nuestras viviendas y hemos hecho innumerables mejoras para que estas tierras dejen de ser sólo lotes abandonados de la explotación forestal y se conviertan en un territorio que brinde trabajo y alimentos, respetando el monte, el agua y la vida. Hoy casi 100 campesinas y campesinos trabajamos allí para vivir dignamente.
Denunciamos que constantemente nos amenazan con echarnos de nuestros hogares y lugares de trabajo, donde producimos y alimentamos a nuestras familias y al resto de la sociedad. Ellos especulan para hacerse de papeles de la tierra, acumulando hectáreas, para venderlas o hacer algún otro negocio fácil a costa de nuestro sufrimiento y acumular ganancias preocupados únicamente por su propio enriquecimiento.
Hace poco más de 2 años fuimos sorprendidos por una demanda, en la que se nos acusan de ser intrusos de nuestras tierras. Quien pretende despojarnos es RADKE, Yngridt Isabel de la localidad de Puerto Esperanza. Ella, sus familiares o empleados son absolutamente desconocidos para nosotros.
Hoy nos encontramos ante el avance de un juicio de desalojo a nuestras familias, legítimas dueñas de la tierra, trabajadoras y defensoras incansables de la producción de alimentos sanos para nuestro pueblo, guardianes de la tierra que nos dignifica en el campo.
Frente a las injusticias nos organizamos para hacer oír nuestra voz a la justicia y a quien corresponda.
Hoy nos encontramos ante el avance de un juicio de desalojo a nuestras familias, legítimas dueñas de la tierra, trabajadoras y defensoras incansables de la producción de alimentos sanos para nuestro pueblo, guardianes de la tierra que nos dignifica en el campo.
Frente a las injusticias nos organizamos para hacer oír nuestra voz a la justicia y a quien corresponda.
Nos convocamos el miércoles 13 de agosto, en las puertas del juzgado de Puerto Iguazú, para denunciar públicamente este atropello y reclamar por la función social de la tierra.
